Una pequeña llama puede convertirse en un fuego en apenas  30 segundos, y un edificio puede transformarse  en  un infierno en cuatro minutos y medio. Las normativas contra incendios declaran que un edificio debería ser evacuado en 20 minutos o menos, pero la propagación del fuego en un edificio en condiciones adversas puede llega a ser tan rápida, que cada minuto cuenta.

La inhalación del humo y los gases tóxicos, así como la rápida propagación del fuego es uno de los principales puntos a tener en cuenta ante una evacuación controlada ya que ello nos asegura la prevención de vidas humanas.

Para ello el vidrio resistente al fuego juega un papel importantísimo ante la extinción de un incendio ya que según el tipo, podemos reducir la velocidad de propagación del fuego, contener los gases venenosos y el humo durante mucho tiempo. De esta manera aseguramos  una evacuación controlada  de civiles y una protección de los equipos de contra incendios con el fin que puedan  asistir y extinguir con seguridad y rapidez el fuego.

Según esto vamos a detallar las diferentes clasificaciones de vidrio antifuego existentes para poder asegurar una buena elección del elemento constructivo.

Las características de resistencia al fuego de un elemento de construcción de vidrio determinan cuanto tiempo dicho elemento es capaz se contrarrestar la propagación de las llamas, limitándolas a una determinada zona.

La resistencia al fuego de un elemento de construcción de vidrio se calcula utilizando numerosos criterios.

  • Estabilidad: el vidrio no se rompe.
  • Resistencia las llamas, el humo y los gases calientes. El vidrio bloquea la propagación de las llamas, el humo y los gases (pero no la propagación del calor). El incendio queda circunscrito a una zona determinada.
  • Limitación de la radiación: el vidrio limita la cantidad de calor que se propaga hacia la zona que se desea proteger.
  • Aislamiento térmico: la temperatura media del vidrio en el lado protegido se mantiene por debajo de 140ºC, eliminando así el riego de autocombustión debida a la radiación  o a la convención de las sustancias expuestas a las lamas y permitiendo la evacuación del edificio con mas calma y seguridad.

 

La clasificación de las normas europeas utiliza el siguiente sistema:

 

e

E: INTEGRIDAD  Resistencia a las llamas – tiempo durante el cual se bloquea la propagación de las llamas y el humo desde el lado no expuesto de la pared.

 

ew

EW: INTEGRIDAD Y RADIACION. Transferencia térmica máxima – tiempo durante el cual la radiación de calor queda limitada a un nivel de 15kW/m² en el lado opuesto al incendio.

 

ei

EI: INTEGRIDAD Y AISLAMIANTO. Aislamiento térmico – tiempo durante el cual la temperatura no sobrepasa un determinado umbral térmico en el lado no expuesto.

 

La resistencia al fuego de cada elemento queda determinada por el tiempo (expresado en minutos) durante el cual el  elemento cumple uno o más de los elementos pertinentes.

Por ejemplo, una puerta que ofrezca una resistencia al fuego de 30 minutos en términos de integridad será clasificada como E30, mientras que una ventana  que ofrezca una resistencia al fuego de una hora en términos de reducción de la transferencia de calor será EW6; una separación interior de vidrio resistente al fuego durante una hora en términos de aislamiento térmico se clasificará como EI60.