Existen múltiples posibilidades de ahorrar energía en los edificios utilizando la energía solar como fuente energética. Esto se obtiene utilizando la energía solar de forma pasiva a través de una arquitectura coherente energéticamente o arquitectura bioclimática. Con esta arquitectura, teniendo en cuenta las técnicas naturales de acondicionamiento y los componentes de la envolvente, se pueden obtener edificios eficientes energéticamente.

Además, se utiliza la energía solar para aplicaciones térmicas de calentamiento de fluidos y de producción de electricidad usando sistemas solares térmicos y fotovoltaicos integrados en la edificación. Estos sistemas deben estar integrados en los edificios desde los primeros pasos del diseño, ya que el desarrollo y difusión de la energía solar activa en los países industrializados pasa por su integración en edificios.

Los edificios así concebidos y construidos reducen la demanda de energía en el acondicionamiento térmico, con lo que se reducen las emisiones de CO2 y otros agentes de polución a la atmósfera. Luego, son «edificios que se alimentan con el sol» de forma pasiva y activa.

Por lo que a la hora de hablar de Arquitectura Bioclimática se está haciendo mención a la utilización de la energía solar en los edificios, considerando los requerimientos térmicos y eléctricos, es decir, las aplicaciones de la energía solar pasiva, así como la utilización de la Energía Solar Térmica a baja temperatura y para producir electricidad, o sistemas solares fotovoltaicos, debiendo estar estas aplicaciones integradas en la edificación como un componente más.

Según se ha comprobado, «el consumo energético en los edificios, podría reducirse más de un 50% en la Unión Europea para el año 2010, mediante la integración de sistemas solares pasivos y activos desde las primeras fases del diseño del edificio.

España tiene una situación de privilegio por ser el país con mayor nivel de radiación solar de la UE. El Código Técnico de la Edificación tiene como uno de sus objetivos conseguir un uso racional de la energía necesaria en los edificios, reduciendo el consumo energético y utilizando para ello fuentes de energía renovables. Así, la normativa establece la obligación de incorporar criterios de eficiencia energética y el uso de energía solar, térmica y fotovoltaica, en los nuevos edificios o en aquellos que se vayan a rehabilitar. Gracias al nuevo CTE, España se ha posicionado como pionera en legislación solar.

La aplicación de la ejecución de las instalaciones solares y, en general, de todo lo referente al Código Técnico de la Edificación, va a depender de muchos actores que deben trabajar coordinados para que en los edificios se puedan ejecutar todo este tipo de instalaciones sin que suponga un deterioro de la imagen de los mismos. El arquitecto deberá diseñar un edificio teniendo en cuenta las instalaciones solares y, de acuerdo con el proyectista de las mismas, buscar las soluciones que supongan en cada momento el cumplimiento de los requisitos de la norma y, lo que es más importante, las instalaciones que funcionen y sean fiables técnica y económicamente.

Enrique Cobos Laborda, Director de Birds Eólica